Todos los que sentimos la Semana Santa y la vivimos todo el año, estamos, en estos dias, con los ojos puestos en el cielo, y ya no al lado de Dios y su madre, ya que siempre está ahí, si no en las nubes de tormenta. Si este año, por desgracia la semana santa hubiera coincidido en esta semana, las lagrimas se hubieran unido a la torrentera de agua que ha caido del cielo. de momento simplemente se ha suspendido por parte de la hermandad el ensayo del Domingo, siendo este el único que hemos suspendido, y por fuerzas ajenas a nuestra hermandad, hay que destacar la preocupación de los costaleros y el desasosiego por no haber salido, al decir que, la costumbre ha conseguido la rutina y ahora haber que hacian los Domingos.
De momento imploraremos a nuestra santísima madre de la Esperanza, para que el domingo de Ramos no llueva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario